El entrenador Vincent Collet deja de ser el seleccionador de baloncesto masculino de Francia tras 15 años en el puesto, en los que ha conquistado un Eurobasket, dos platas olímpicas y dos bronces mundiales, y del que se aparta para desempeñar la función de Asesor Especial de la Dirección Técnica Nacional de la federación gala (FFBB), según confirmó la entidad este lunes en un comunicado.
Collet es el técnico que más veces ha dirigido a la selección francesa, un total de 253 partidos desde que asumiera el cargo el 4 de marzo de 2009, y también el que más triunfos ha celebrado en el cargo, un total de 179. En estos 15 años ha dirigido a ‘Les Bleues’ en seis Eurobaskets, cuatro Mundiales y cuatro Juegos Olímpicos, consiguiendo el podio en ocho de estos torneos, destacando el título europeo en 2013.
El ya exseleccionador se ocupará ahora del asesoramiento en la formación de jugadores y técnicos, así como en la evolución del proyecto de rendimiento en los dos próximos Juegos Olímpicos, la formación continua de los responsables técnicos y la promoción de entrenadores hacia las selecciones nacionales, entre otras funciones.
«Sus habilidades y experiencia constituirán un valor agregado indiscutible dentro de la Dirección Técnica Nacional de la FFBB», explicó el comunicado, que también anuncia que estas misiones podrían verse interrumpidas si el técnico aceptara algún puesto de entrenador asistente en la NBA o de técnico principal en la Euroliga.
Collet dijo que estos 15 años han sido «toda una parte» de su vida como entrenador y de su vida en general, y que no se siente «acabado» como entrenador. Para él, son «muy importantes estas misiones ligadas a la transmisión de la perspectiva del entrenador».
El técnico destacó que están ante una «reconstrucción», y que en los últimos Juegos Olímpicos acudieron con una selección que estaba en el fin de una generación y el surgimiento de una nueva». «Para los objetivos que se avecinan en Los Ángeles, tendremos que aprovechar una generación joven que es quizás la más prometedora que jamás hayamos tenido», remarcó.
«Nuestro deporte es muy competitivo y mantenerlo es difícil. Después de los Juegos, la gente hablaba del año 2028 y decía ‘venceremos a Estados Unidos en Los Ángeles’. En París estuvimos mejor el Día D que Canadá y Alemania, pero sería pretencioso decir que fuimos mejores que esos equipos. Hay que tener esto en cuenta y medir el grado de dificultad», afirmó el francés, que reconoció que ha sido «un privilegio y un honor» ser seleccionador galo.
