La selección inglesa se convirtió este martes en la primera finalista de la Eurocopa Femenina que se está celebrando en Inglaterra después de ganar con contundencia a Suecia, a la que goleó por 4-0 en el Estadio Bramall Lane de Sheffield.
El conjunto que entrena Sarina Wiegman certificó su billete para la cita del próximo domingo en Wembley después de un partido en el que, salvo en el inicio, fue superior a las suecas, a las que les faltó puntería en los momentos claves y una mejor actuación a nivel defensivo.
La anfitriona, que jugará su tercera final continental tras las de 1984 y 2009, se ganó el derecho a pelear una vez más por conquistar su primer gran título y lo hizo dejando atrás los problemas vividos ante la selección española en los cuartos, con un nuevo encuentro muy sólido que la afianzan de nuevo como la gran favorito con permiso de Alemania o Francia, que buscarán este miércoles en Milton Keynes ser su rival.
Nadie esperaba un duelo cómodo para las inglesas después del buen arranque que firmó el equipo de Peter Gerhardsson, que gozó de muy buenas ocasiones para haber cambiado un guión que luego sólo tuvo una actriz principal. Así, antes del minuto de juego, Earps tuvo que intervenir ante Jakobsson para evitar el 0-1, y poco después repitió ante Blackstenius, que el consiguiente saque de esquina cabeceó al larguero con la guardameta mal colocada.
La blaugrana Rolfo, tras un robo a su futura compañera Lucy Bronze, tampoco acertó en la que tuvo, y Kirby realizó un corte providencial cuando una jugadora sueca se aprestaba a rematar desde el centro del área. Inglaterra, que apenas había podido amenazar, sobrevivió a ese inicio, se rehizo de la mano de Mead, Kirby y Bronze, y logró hacer el partido suyo.
Suecia demostró sus problemas en el medio y atrás y comenzó a sufrir más. La mejoría de la anfitriona tuvo buena recompensa ya que pasada la media hora, la goleadora Mead resolvió a la perfección un centro de Bronze para hacer el 0-1 e igualar el récord de seis goles en una fase final de una EURO que ostentaba la alemana Inka Grings en la edición de 2009.
El descanso no trajo buenas noticias para la actual subcampeona olímpica. En un saque de esquina, Bronze cabeceó ‘picado’ con mucha habilidad para superar a Lindahl y encarrilar el pase a la final nada más reanudarse el duelo.
Suecia trató de encajar el golpe, realizó cambios y se lanzó a por el tanto que le metiese de nuevo en la semifinal, a riesgo de dejar espacios para las transiciones rivales. Hemp pudo hacer el 3-0, pero, a puerta vacía, remató al travesaño.
Las suecas tuvieron dos ocasiones seguidas tras sendos saques de esquina, pero Earps le negó de nuevo el tanto a Blackstenius y ahí se terminó el duelo. Russo hizo el 3-0 de tacón tras estrellar su primer remate en una Lindahl poco afortunada en este tanto y en el cuarto, obra de Kirby en una vaselina que premió su gran encuentro. Su rival se acabó de hundir, pero las anfitrionas no pudieron sumar vigesimoprimer tanto en el torneo.