El ciclista esloveno Tadej Pogacar (UAE Team Emirates) se mostró crítico tras perder este miércoles el maillot amarillo del Tour de Francia en la undécima etapa tras descolgarse en la subida final al Col du Granon y ceder ante el danés Jonas Vingegaard (Jumbo-Visma), aunque la lucha entre ambos «todavía» no se ha acabado.
«Quiero competir y darlo todo de aquí a París para acabar este Tour de Francia sin ningún remordimiento. Esto no se ha acabado todavía. Jonas [Vingegaard] me ha metido tres minutos hoy, y tal vez sea yo quien le meta tres minutos a él mañana. Vamos a luchar hasta el final», dijo el esloveno tras acabar tercero.
«No sé qué me ha pasado hoy. En el Col du Galibier todavía me sentía bien, pese a todos los ataques que había recibido de Jumbo-Visma. En la subida final, sencillamente, no tenía buenas piernas y sufrí desde el pie hasta la cima. No ha sido mi mejor día. Espero encontrarme mejor mañana», apuntó.
En una jornada en la que el Jumbo-Visma afloró su superioridad de bloque, las ganas del esloveno de responder a todos los ataques en el Galibier le pasaron factura en el duro Granon.
«Hoy Jumbo-Visma se la ha jugado desde el principio y ha hecho la carrera muy exigente, con una estrategia fantástica. Para nosotros, con varios gregarios menos, era muy difícil controlar quien entraba en la fuga y al final Van Aert y Laporte se nos escaparon», sentenció el dos veces ganador de la ronda francesa.